El post anterior, sobre si el contexto es el nuevo rey, tenía trampa. Ciertamente, como apunta Eva Sanagustín, contenido y contexto son como hermanos. Solo hay que echar un vistazo al esquema básico de la comunicación para darse cuenta de que código, contexto y canal son claves a la hora de descifrar el mensaje.
Esquema básico de la comunicación
Por otra parte, decía en el post anterior que la información que nos llega depende de nuestro grafo social, y lo mantengo, pero también es cierto que nuestros contactos compartirán aquello que llame su atención. Es decir, que si el contenido no es bueno (relevante para ellos) no lo compartirán y, por tanto, no se extenderá a través de su grafo social y nunca nos llegará. Así que sí, David Soler, estamos de acuerdo: el contenido sigue siendo estratégico 🙂
En conclusión: hay que hacer buenos contenidos que despierten el deseo de ser compartidos en redes sociales. Es decir, que hay que crear contenidos que sean relevantes para nuestros públicos, esos con los que queremos comunicarnos. Aunque eso ya lo sabíamos. ¿Cuál es entonces la diferencia? ¿Ha cambiado algo? ¡Sí! Que ahora es más importante que nunca. El contenido relevante es el primer paso para extenderse por la Red, de uno a uno primero (one to one) para luego viajar de uno a muchos (one to many).
