“En Internet nada se hace a lápiz, todo se hace a boli», escribe Ben Mezrich en Multimillonarios por accidente. Ya hemos comentado antes en Blog-o-corp que Internet no olvida. Como explicábamos en Visibilidad, ya en 2009, cada vez más nuestras «huellas digitales» permitirán que un tercero se forme una opinión sobre nosotros sin habernos visto nunca.
De hecho, muchos de los que estáis leyendo este post tendréis una opinión de este blog y de su autora, aunque no hayamos coincidido nunca presencialmente. Esta opinión quizá tenga en cuenta algo de lo que explico en la sección de ¿Quién soy?, pero sobre todo se basará en lo que os haya aportado la lectura de este post, en qué os parece Blog-o-corp y en lo que hayáis leído sobre mí en la Red. Mi reputación digital es la suma de todo esto, como explico en este vídeo:
Como veis, importa lo que uno hace y dice, pero lo que más peso tiene en la creación de la reputación es lo que los demás dicen de nosotros. Como explica Risto Mejide, «da igual lo que diga o piense de mí mismo. Es lo que sientan los demás cuando me recuerden. Ésa sigue siendo mi verdadera y única marca. Cada uno de nosotros gestiona su propia marca.»
Sin duda, en la creación de esta marca personal es indispensable, en primer lugar, que nosotros mismos tengamos claro quiénes somos y qué queremos conseguir. Esta fase de autoconocimiento se encuentra en la base del método iceberg que propone Soy mi marca y que os recomiendo si estáis en proceso de creación o redefinición de vuestra marca personal.
Y una vez tenemos esto claro, llega el momento de darlo a conocer. Porque si no explicas quién eres, qué puedes ofrecer y qué te diferencia de los demás, ¿cómo lo van a saber las empresas? ¿Cómo te van a contratar si no saben que existes? Para conseguir comunicar tu propuesta de valor, te recomiendo seguir este plan de gestión de la reputación en tres pasos:
Si lo pones en práctica, poco a poco irás mejorando tu visibilidad en la Red. ¡Porque Internet puede ser tu mejor aliado! Los medios sociales permiten que cualquier persona se convierta en su propio medio y se comunique con el resto del mundo. ¿A qué estás esperando para aprovechar las oportunidades que ofrece Internet?
Además, hay quien dice que es solo cuestión de tiempo y que en breve todos tendremos un reputation score, igual que ya tenemos un credit rating, que influirá en muchos ámbitos de nuestra vida, desde que nos concedan una hipoteca a que nos quieran alquilar o no un piso. Y si no os lo creéis, leed este artículo del The Guardian donde Michael Fertik, autor de The Reputation Economy, asegura que la reputación digital es cada vez más valiosa, más incluso que el dinero o el poder.
¿Te parece una afirmación exagerada? ¡Ven esta tarde a la mesa redonda sobre Redes sociales y marca personal del Personal Branding Day Lab y lo comentamos en persona! Compartiré mesa redonda con Francesc Grau y Cèlia Hil. ¡Aún estáis a tiempo de inscribiros!
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