Cada cierto tiempo, algún gurú vaticina la muerte de las relaciones públicas. Y de la web, y de los blogs… Podríamos decir que es algo cíclico. De hecho, siguiendo la línea de los artículos que acabo de enlazar, este post debería titularse: PR is dead, long live the PR.
Hace unos días, Jonathan Bean, Chief Marketing & Growth Officer de Mynewsdesk, se preguntaba en su blog: PR is Dead? Y él mismo se respondía: «No It’s Not But It’s What You Do That Matters». Rafael Martín Aguado toma con punto de partida este artículo para reflexionar sobre los retos actuales de la comunicación corporativa.
La tesis de Bean se puede resumir en este párrafo de su post:
«For me PR is not dead but it is evolving rapidly. Those individuals, departments and agencies that make the transition will survive and thrive in the new world. For those that don’t death is assured. The successful modern communicators job is not to create clever messages (what you say), select distinct audiences and pitch the media to ensure they are reached (what others say about you). It is to have an impact on what an organisation does.»
Es decir, que no es que las relaciones públicas vayan a desaparecer sino que están evolucionando, como lo han hecho desde sus orígenes, para responder a las necesidades del contexto. No es nada nuevo, como diría Paul Capriotti.
Quedó patente en el World Public Relations Forum (#WPRF2014): el mundo está cambiando y las relaciones públicas han de cambiar con él. Ante esta realidad, hemos de comunicar con autenticidad, con hechos, comunicar con conciencia, como rezaba el lema del congreso. Porque hoy en día la coherencia entre lo que se dice y lo que se hace es (aún) más importante. Este es el camino para alcanzar la autenticidad que legitime el ejercicio de las relaciones públicas, como escribe Rafa en su blog.
¿Por qué? Porque los públicos ya no van a creerse las milongas que le cuenten las marcas nunca más, que es la tesis que defiende Robert Phillips, ex CEO & President EMEA de Edelman, en el libro Trust me PR is Dead. Ya no sirve con crear un eslogan bonito y decir que se defiende una buena causa: hay que defender esa causa, implicarse y actuar. Las palabras bonitas ya no son suficientes.
Entonces, ¿realmente las relaciones públicas están muriendo? ¿O son las relaciones públicas, en el sentido tradicional, las que están condenadas a desaparecer, como escribe Jim Nichols en Forbes? Yo apuesto por esto último. Emily Tippins lo explicaba muy bien ya en 2012 en este artículo publicado en Baekdal: Is There a Future for Traditional PR? Como veis, no es nada nuevo.
Al fin y al cabo, no hace demasiado que superamos la burbuja del community management (¿o aún estamos en ella?). ¿Y qué es un community manager? Según AERCO, «es aquella persona encargada/responsable de sostener, acrecentar y, en cierta forma, defender las relaciones de la empresa con sus clientes en el ámbito digital, gracias al conocimiento de las necesidades y los planteamientos estratégicos de la organización y los intereses de los clientes». ¿Os resulta familiar la definición? ¿No os parece que estas funciones están muy cerca de las relaciones públicas?
Hola Cristina, un gusto pasarme de nuevo por su blog y unirme al debate
Yo, personalmente y hablando de forma genérica, veo a las relaciones públicas más vivas que nunca; con más medios que nunca para llegar a sus públicos. Que el discurso persuasivo pueda estar en desuso (por la acción y emponderamiento de los stakeholders no por iniciativa de la organización) es otro debate.
Me resulta, cuanto menos, curioso que justo cuando más se está hablando de contenido corporativo (déjame que recuerde mis artículos sobre el periodismo de marca y el marketing de contenidos en contraposición con las RRPP) y acercamiento a los públicos, se diga que las relaciones públicas están muertas.
Los medios tradicionales están en una crisis perpetua, y aquellos que entiendan las relaciones públicas como relaciones con los medios entiendo que puedan pensarlo, pero no por eso su idea es más certera.
Por otra parte si cogemos cualquier manual de relaciones públicas de referencia (personalmente me gusta el de Wilcox) podemos constatar que esta especialidad sigue más viva que nunca, de hecho creo que el nombre “relaciones públicas” sigue estando muy vigente, por lo que significa “Relación” y por lo que significa “Público”.
¡Hola «autor misterioso de Two Way Road»! 😉 Un placer tenerte de nuevo por aquí.
Veo que estamos de acuerdo en este tema. Si, como propones, recuperamos la definición original de las relaciones públicas y recordamos que su esencia es gestionar las relaciones con los públicos creo que no hay duda de que su función sigue hoy más viva que nunca.
Saludos.