De toda lectura se aprende algo. Lo tengo más que comprobado. Y el libro de Julián Marquina-Arenas Plan social media y Community Manager (Editorial UOC) me lo ha demostrado una vez más. Ya me avisó Julián de que muchas cosas de las que explica ya las conocería, y yo le respondí que siempre se aprende algo nuevo. Me gusta descubrir nuevos enfoques, otras formas de explicar un mismo tema, porque siempre te enriquecen.
En el libro de Julián he descubierto casos de crowdsourcing como el Open Planet Ideas de Sony y WWF, el App my Ride de Volkswagen y el Design byME de Lego (que finalizó en enero de 2012).
Me ha gustado también el análisis de la evolución de la búsqueda “Community Manager” en Google: es increíble ver cómo se dispara a partir del 2010, aunque a principios de año el interés disminuye (será que la gente está pensando aún en la Navidad). Parece que la tendencia es que siga creciendo, veremos hasta cuándo.
Más allá de que el término esté de moda, “muchas organizaciones empiezan a darse cuenta de los beneficios de un Community Manager puede reportarles en transparencia y comunicación empresarial, y a medio plazo también en ventas”, explica el autor. Aunque ya advierte de que: “para ello debe tener el apoyo de la dirección, y la implicación del resto de personal. El Community Manager no es un hombre solitario sino que se tiene que sentir apoyado por la organización, que ésta crea que su trabajo en los medios sociales le va a traer beneficios. No se trata de tener esa figura solamente para sentirse modernos”. Ojalá muchos directivos lo leyeran y, lo más importante, se lo creyeran.
Aunque el libro se llame “Plan social media”, en realidad explica mucho más que eso. Hace un completo repaso por las herramientas sociales más importantes: blogs, principales redes sociales, el universo Google… Y es que presentar las plataformas es esencial para poder hacer un buen plan de medios sociales (es algo que yo también suelo hacer en mis clases).
En el plan en 7 pasos que nos propone Julián sólo he echado en falta hacer referencia a la medición cualitativa en la fase de valoración de los resultados (analizar la calidad de los comentarios, por ejemplo, además de la cantidad), algo que sí menciona cuando habla del ROI.
Para acabar, os recomiendo echar un vistazo al protocolo de actuación ante una mención o comentario sobre la empresa de Shaun Holloway que Julián incluye en el libro:
Gracias, Julián, por un texto claro, ágil, práctico y, lo más importante, lleno de buenos consejos y de sentido común (que no es tan común como nos pensamos).